Hot-mail

Fueron suficientes estaciones como para que arribada al trabajo estuviera algo más calma...Traté de no pensar pero fue imposible...me debatía entre el Wow! qué fuerte lo que siento y el Cómo pudiste hacer algo así?
Trabajé, conversé y anduve por la vida como mecánicamente... hasta que al día siguiente recibí su mail. Decía algo sobre desubicarse, de no darse cuenta dónde estábamos y los riesgos que habíamos corrido...pero que aún así me quería ver de nuevo. Hablaba más suelto, como si mi respuesta al beso (el increíble acá no!) lo hubiera relajado y dado la seguridad de que yo estaba igual que él. Me dijo que la noche del encuentro lo había dejado loco, que hubiera matado a Julieta y que después yo habría llegado a casa muuucho mas tarde...
OK, la asignatura pendiente existía... pero lo que este tipo me despertaba ahora, no me había pasado antes seguro...ni con el ni con nadie...
Le contesté sin pensar demasiado, cosa que yo no hago habitualmente... las palabras volaban en mis dedos. Le dije todo, no me guardé nada...que me había dejado tan loca como él, que no podía pensar en otra cosa que no fuera verlo de
nuevo, que sabía que era una locura pero que en ése momento no me importaba... Me escribió de sus sueños y sus frustraciones, yo de los míos, de mi inseguridad, de que no me veía bonita o sexy como el decía, de que no entendía por qué le pasaba ésto conmigo...La cadena de mails se fue poniendo cada vez más explícita...demasiado...
Paramos...pero sólo por la promesa de vernos otra vez...